S. Damián de Molokai—10 Mayo. Descrito como un verdadero «mártir de la caridad», nació Jozef de Veuster en Bélgica en 1840. A partir de una familia católica devota, en 1860 se unió a la orden del «Sagrado corazón» y recibió el nombre de Damián. Su hermano había planeado ir como misionero a Hawai, pero cayó enfermo y Damián fue en su lugar. En 1864 fue enviado a Kohala una isla situada en el norte de Hawai, donde permaneció durante 9 años. En 1873 se ofreció voluntariamente para servir a Dios en la isla apartada de leprosos de Molokai, con 816 leprosos. Les enseñó a cultivar y ser autosuficientes, pero lo más importante: les dijo lo mucho que Jesús amaba a cada uno de ellos y les enseñó a ofrecer sus sufrimientos a él. Finalmente contrajo la enfermedad y murió a los 49 años en la isla de Molokai en 1889. Fue canonizado en 2009 por el Papa Benedicto XVI y es el santo patrón de Hawai, leprosos y marginados.
Ntra. Señora de Fátima – 13 Mayo. Es el título dado a la Virgen que se apareció a tres niños pastores en una serie de visiones en 1917 en las cercanías de Fátima, en Portugal. Los tres niños eran Lucía Santos y Jacinta y Francisco Marto. La Virgen se identificó a ellos como «La Señora del Rosario» y apareció con un vestido blanco y resplandeciente. Durante la primera aparición ella les dijo que regresaría al mismo punto a una encina en la Cova da Iria el 13 de cada mes durante seis meses. Nuestra Señora les dijo que rezaran el rosario todos los días para obtener la paz en el mundo y para poner fin a la guerra en Europa. La Virgen le dijo a Jacinta y Francisco, que pronto serían llevados al cielo, y Lucía permanecería en la tierra para difundir la devoción a Nuestra Señora, siendo instruida para construir una capilla en el lugar de las apariciones dedicadas a la Madre María. Las visiones de Fátima fueron sin duda las más proféticas de todas las visiones modernas que aluden a la segunda guerra mundial y, posiblemente, las guerras futuras por venir.
S. Isidro Labrador – 15 Mayo. Nació en 1070 en Madrid, de padres pobres pero muy devotos. Pasó su vida trabajando al servicio de un rico propietario de tierras llamado Juan de Vergas, en una granja en las cercanías de Madrid. Se casó con una joven llamada María de la Cabeza, más tarde conocida como Santa María de la Cabeza y tuvo un hijo. Era un alma gentil que se preocupaba por los pobres y también tenía una gran compasión por los animales. Muchos milagros fueron atribuidos a él, se dice que originó una fuente de agua fresca en la tierra seca. Tuvo visiones celestiales y se dice que los ángeles le ayudaron en su trabajo en el campo. Murió en 1130 el 15 de mayo en su lugar de nacimiento y fue canonizado por el Papa Gregorio XV en 1622. Es el santo patrón de Madrid y los agricultores.